La belleza de Tarragona fue admirada por los iberos, grecos y los antiguos romanos. Hace dos mil años, esta ciudad fue una de las más importantes en el Imperio Romano y la evidencia de antiguo esplendor sobrevive hasta nuestros días. Un impresionante anfiteatro con vistas al mar, donde luchaban los gladiadores y morían los primeros cristianos mas tarde ha sido elegido para la construcción de la primera iglesia arriana. Junto a él se encuentra el palacio de los patricios romanos y los restos del circo, donde se hacían las competiciones de carros - una especie de Fórmula 1 moderna. Todavía se conservan las impresionantes murallas y torres romanas así como los restos del foro, que podréis visitar, así como la enorme catedral gótica de Tarragona, construida dicen en el lugar donde predicaba el San Pablo. Podréis dar un paseo por las estrechas calles del barrio judío y "tocar de hierro" en el famoso balcón del Mediterráneo - es una de las más famosas tradiciones de los residentes y visitantes de Tarragona, relacionada con las conquistas medievales del reino de Aragón. Y también veremos el puerto pesquero de la ciudad, rodeado de calles bulliciosas con las típicas tabernas de pescadores, donde sirven las deliciosas sardinas asadas y platos tradicionales de arroz.
Duración - 3/4 horas
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